Hace más de 100 años, un estudioso emprendió un viaje a caballo a través del desierto de Yura, en Arequipa, Perú, en busca de una fuente de agua virgen.
Suq’usa o carrizo
Manuel Aurelio Vinelli, encuentra un exuberante valle al que bautizó Socosani, por la abundancia de socos o carrizos, y halló ahí los manantiales de agua mineral natural, que discurrían desde el Volcán Chachani.
Hallazgo bendito
En Francia, analizadas las muestras enviadas por Vinelli, científicos la reconocieron como única, y certificaron las propiedades minerales naturales del agua Socosani.
Al alcance de todos
Así, Manuel Aurelio implementó la primera planta embotelladora de agua mineral natural peruana en el corazón del valle. Desde ese día el agua mineral Socosani y su balance único de propiedades está al alcance de todos.